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Nido: la armonía del ritmo y la calidez

Esta etapa abarca desde los cuatro meses hasta que el peque mantenga bien su equilibrio y tenga una buena marcha.

Durante esta periodo, la guía permanece mucho en el suelo acompañándolos y ofreciéndoles materiales acordes a su edad evolutiva.

Nuestro Nido está preparado para acoger a 8 niños y 2 adultos.

Libertad y movimiento

En este espacio se permite que los niños y niñas se muevan libremente, sin el uso de hamacas, tronas, ni posturas forzadas que ellos no hayan adquirido por si mismos. Así, se favorece un progreso motor armonioso, ayudándoles a desarrollar el gateo y posteriormente, la marcha.

El area del sueño

Este entorno cuenta con un espacio diferenciado, el del sueño. Aquí, los niños y las niñas tienen camas bajas a las que pueden acceder de manera autónoma ya que están a su altura y no existe ninguna barrera.

Confiamos en sus capacidades

Autonomía también en la introducción alimentar

El “Baby Led Weaning” (BLW) es un método que consiste en iniciar la alimentación del niño con alimentos de tamaño y texturas adecuados para comer por solos. Se trata de una manera de incorporar los sólidos en la alimentación del bebé, sin pasar por la fase de los purés o las papillas, siendo el propio bebé quién se alimenta usando sus manos.

De esta manera, al bebé se le permite descubrir nuevos sabores, texturas, colores y olores en la comida y le ayuda a desarrollar la coordinación ojo-mano y la masticación.

Lo ideal es comenzar ofreciendo alimentos cocidos al vapor: patatas, zanahorias, calabaza, calabacín, o frutas blandas como plátanos, peras, entre otros. Los alimentos se proporcionan en trocitos o en “bastones”, para evitar atragantamientos.

En nuestra escuela iniciamos este método acompañando al niño y a la familia en todo el proceso. Cuando la familia decide empezar a hacerlo, juntos se van comunicando qué alimentos se han introducido para ir en la misma línea.

Por otro lado, destacamos que, en el ambiente de Nido hay una mesa en forma de “U” que ayuda a que los niños puedan llevar a cabo este método alimenticio, ya que las dos maestras estarán en constante vigilancia de lo que come cada niño. Una de ellas siempre estará frente a ellos y la otra por el lateral.

El niño es el constructor del hombre y no existe ningún hombre que no se haya formado a partir del niño que fue una vez.

María Montessori

Nido: la armonía del ritmo y la calidez

Esta etapa abarca desde los cuatro meses hasta que el peque mantenga bien su equilibrio y tenga una buena marcha.

Durante esta periodo, la guía permanece mucho en el suelo acompañándolos y ofreciéndoles materiales acordes a su edad evolutiva.

Nuestro Nido está preparado para acoger a 8 niños y 2 adultos.

Libertad y movimiento

En este espacio se permite que los niños y niñas se muevan libremente, sin el uso de hamacas, tronas, ni posturas forzadas que ellos no hayan adquirido por si mismos. Así, se favorece un progreso motor armonioso, ayudándoles a desarrollar el gateo y posteriormente, la marcha.

El area del sueño

Este entorno cuenta con un espacio diferenciado, el del sueño. Aquí, los niños y las niñas tienen camas bajas a las que pueden acceder de manera autónoma ya que están a su altura y no existe ninguna barrera.

Confiamos en sus capacidades

Autonomía también en la introducción alimentar

El “Baby Led Weaning” (BLW) es un método que consiste en iniciar la alimentación del niño con alimentos de tamaño y texturas adecuados para comer por solos. Se trata de una manera de incorporar los sólidos en la alimentación del bebé, sin pasar por la fase de los purés o las papillas, siendo el propio bebé quién se alimenta usando sus manos.

De esta manera, al bebé se le permite descubrir nuevos sabores, texturas, colores y olores en la comida y le ayuda a desarrollar la coordinación ojo-mano y la masticación.

Lo ideal es comenzar ofreciendo alimentos cocidos al vapor: patatas, zanahorias, calabaza, calabacín, o frutas blandas como plátanos, peras, entre otros. Los alimentos se proporcionan en trocitos o en “bastones”, para evitar atragantamientos.

En nuestra escuela iniciamos este método acompañando al niño y a la familia en todo el proceso. Cuando la familia decide empezar a hacerlo, juntos se van comunicando qué alimentos se han introducido para ir en la misma línea.

Por otro lado, destacamos que, en el ambiente de Nido hay una mesa en forma de “U” que ayuda a que los niños puedan llevar a cabo este método alimenticio, ya que las dos maestras estarán en constante vigilancia de lo que come cada niño. Una de ellas siempre estará frente a ellos y la otra por el lateral.

El niño es el constructor del hombre y no existe ningún hombre que no se haya formado a partir del niño que fue una vez.

María Montessori

Nido: la armonía del ritmo y la calidez

Esta etapa abarca desde los cuatro meses hasta que el peque mantenga bien su equilibrio y tenga una buena marcha.

Durante esta periodo, la guía permanece mucho en el suelo acompañándolos y ofreciéndoles materiales acordes a su edad evolutiva.

Nuestro Nido está preparado para acoger a 8 niños y 2 adultos.

Libertad y movimiento

En este espacio se permite que los niños y niñas se muevan libremente, sin el uso de hamacas, tronas, ni posturas forzadas que ellos no hayan adquirido por si mismos. Así, se favorece un progreso motor armonioso, ayudándoles a desarrollar el gateo y posteriormente, la marcha.

El area del sueño

Este entorno cuenta con un espacio diferenciado, el del sueño. Aquí, los niños y las niñas tienen camas bajas a las que pueden acceder de manera autónoma ya que están a su altura y no existe ninguna barrera.

Confiamos en sus capacidades

Autonomía también en la introducción alimentar

El “Baby Led Weaning” (BLW) es un método que consiste en iniciar la alimentación del niño con alimentos de tamaño y texturas adecuados para comer por solos. Se trata de una manera de incorporar los sólidos en la alimentación del bebé, sin pasar por la fase de los purés o las papillas, siendo el propio bebé quién se alimenta usando sus manos.

De esta manera, al bebé se le permite descubrir nuevos sabores, texturas, colores y olores en la comida y le ayuda a desarrollar la coordinación ojo-mano y la masticación.

Lo ideal es comenzar ofreciendo alimentos cocidos al vapor: patatas, zanahorias, calabaza, calabacín, o frutas blandas como plátanos, peras, entre otros. Los alimentos se proporcionan en trocitos o en “bastones”, para evitar atragantamientos.

En nuestra escuela iniciamos este método acompañando al niño y a la familia en todo el proceso. Cuando la familia decide empezar a hacerlo, juntos se van comunicando qué alimentos se han introducido para ir en la misma línea.

Por otro lado, destacamos que, en el ambiente de Nido hay una mesa en forma de “U” que ayuda a que los niños puedan llevar a cabo este método alimenticio, ya que las dos maestras estarán en constante vigilancia de lo que come cada niño. Una de ellas siempre estará frente a ellos y la otra por el lateral.

El niño es el constructor del hombre y no existe ningún hombre que no se haya formado a partir del niño que fue una vez.

María Montessori

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